Los visitantes (parte 2): John Millington Synge

20.07.2013 03:29

John Millington Synge (1871-1909) fue un dramaturgo irlandés. Además de por sus propias obras, principalmente de teatro, su figura es muy importante en el renacimiento literario irlandés, pues dedicó parte de su trabajo a recopilar el folclore tradicional, principalmente en el oeste de Irlanda. A este fin visitó, por ejemplo, los islas de Arán y, lo que nos ocupa, An Blascaod Mór, la Gran Blasket.

Fue confudador del Abbey Theatre de Dublín, donde se estrenó una de sus obras más polémicas, El playboy del mundo occidental, una obra en la que muchos críticos aprecian bastantes similitudes con algunas de las personas que conoció durante su estancia en la Isla.

Synge estudió idiomas en el Trinity College, Posteriormente viaje por Alemania, Italia y Francia. En París conoció a William Butler Yeats, quien le recomendó que, si quería dominar la lengua irlandesa, se marchase un tiempo a vivir entre los habitantes de las islas de Arán y que reflejase "con palabras una vida que jamás ha podido expresarse". Synge llegó a Arán por primera vez en 1898 y regresó cuatro veces antes de 1902.

En aquella época, la lengua inglesa dominaba la vida social en Irlanda, con la excepción de algunas zonas del oeste. El dialecto irlandés de Connemara, el hablado en Arán, era notablemente distinto del dialecto de Munster, que se hablaba en los condados de Kerry y Cork. Su hermano Robert le recomendó visitar Kerry si deseaba descubrir un tesoro en forma de historias y expresiones irlandesas. Y fue durante una de esas visitas, que se repetieron durante cuatro veranos, exactamente en julio de 1905, cuando Synge escribió a Willie Long, de Ballyferriter, en el extremo más occidental de la península de Dingle, para solicitar alojamiento en su posada.

Sin embargo, aquello no fue lo que esperaba. Long, miembro de la clase acomodada de la localidad, imponía demasiado respeto entre sus conciudadanos, lo que provocaba que ante su sola presencia cesasen las charlas o se hablase en inglés en lugar de irlandés, idioma considerado vulgar y propio del campesinado. Así que decidió dar un paso más y buscar algún lugar donde el irlandés fuese más puro, un lugar donde se emplease a diario sin complejos. Y ese lugar fue An Blascaod Mór.

Allí siguió la costumbre de alojarse en casa de An Rí, Pádraig Ó Catháin, el Rey de las Blasket, un título que tenía bien poco de nobiliario y mucho de respeto. Otro de los habitantes que aparece reflejado en sus escritos es la hija mayor del Rey, a la que se refiere como 'la pequeña anfitriona', Máire Ní Chatháin o, siguiendo la tradición de la Isla, Máire Pheats Mhicí (Máire, hija de Pádraig, nieta de Micheál. Los apellidos en la Isla no eran muy variados, por lo que había personas que se llamaban y apellidaban igual. De esta forma, indicando de quién se era hijo y/o nieto, era más sencillo no equivocarse). El rey era respetado por su sabiduría, su buen juicio, que nunca se ponía en duda y su valentía, pues era el encargado de cruzar el Blasket Sound determinados días de la semana para ir a buscar el correo a la oficina de Dún Chaoin.

Synge permaneció en la Isla dieciséis días. Pasado un tiempo, cuando un editor le pidió que escribiese algo sobre su estancia en An Blascaod Mór, similar a su obra sobre las islas de Arán, su respuesta fue que no tenía suficiente material. Sin embargo, en 1907 comenzó a escribir una serie de artículos para el periódico The Shanachie. Finalmente, dedicó a su estancia en la Isla un capítulo de su obra In Wicklow and West Kerry , que más adelante traduzco y podéis descargar.

Al parecer, a los habitantes de la Gran Blasket no terminó de gustarles lo que Synge escribió sobre ellos. Es posible que llegasen a sus manos los artículos que iban apareciendo en The Shanachie, aunque también pudieron recibir noticias de estos artículos a través de las cartas que recibían de sus parientes emigrados a América. Máire Ní Ghuithín, hija de "la pequeña anfitriona", aún recordaba lo ocurrido ochenta años después de la visita de Synge por los comentarios que había escuchado en casa.

Como contraste a esta opinión, también se cuenta otra historia, en la que con motivo de la fundación del Abbey Theatre, Synge llegó a decir en cierta ocasión que "si fracasa el proyecto, me marcharé a vivir el resto de mis días con el Rey de las Islas Blasket."

Synge padecía la enfermedad de Hodgkin, una especie de cáncer incurable en aquella época. Falleció poco antes de cumplir treinta y ocho años.

Puedes descargar lo que escribió sobre su estancia en la Gran Blasket AQUÍ

Debajo: foto sacada por Synge en 1905. De izquierda a derecha: Micheál Ó Catháin, Micheál Ó Guithín, Tomás Ó Duinnshlé, Séamas Ó Duinnshlé, Muiris Ó Catháin, Pádraig Ó Catháin (An Rí) y su hija Cáit. Las dos niñas son probablemente las hijas de Micheál Ó Catháin, Neilí y Máire; el chico no se ha identificado.